Sí que lo hago Wilbur, encongimientos pesados (con trampa) una vez por semana después del peso muerto. Más el trabajo que se llevan con remos de todo tipo, facepulls, extensión de cuello... Me crecen como la mala hierba a decir verdad.
Por eso no veo necesario darle mayor frecuencia en mi caso, aunque de requerirla, no veo ningún problema en darle f2-3, el trapecio se recupera bien y aguanta una cantidad brutal de trabajo. En tal caso haría un día trabajo más pesado y/o dinámico (encongimientos con trampa, high pulls...) y otro más estricto (encongimientos, remo al cuello...).
Y casi se me olvidaba, el trabajo de extensión de cuello (tumbado, con arnés, puentes del luchador...) toca muuucho el trapecio, me parece imprescindible aunque te diera igual la medida del cuello.
Un saludo
SESIÓN DE ACONDICIONAMIENTO (27/08/2017)
84,8kg de peso, bien comido y descansado. Calentamiento a base de buenos días a una pierna.
A. 2,2km de carrera @70%
B. Sprints en colina 20° - 10x50m @90% (una bajada al trote, una andando).
C. 1,5km de paseo @30%
Todo en 45'.
SESIÓN DE GIMNASIO YOLO (27/08/2017)
86kg de peso vestido, bien comido y descansado.
A1. Facepulls en polea alta sentado - 85kg 5x15. 70kg x25.
A2. Curl de cuello - 45kg 5x15.
A3. Extensión de cuello - 20kg 5x18.
A4. Flexión lateral de cuello - 20kg 5x20.
Todo en 30'.
Me apetecía entrenar por la tarde y no se me ocurría qué hacer que no me interfiriera con las siguientes sesiones de entreno. Finalmente se me ha encendido la luz y he aprovechado para entrenar pesado el cuello, lo cual es más difícil habitualmente ya que limita bastante la fatiga en espalda, abdominales y sobretodo en el agarre.
Y me lo he pasado pipa.

Los facepulles los he empezado a hacer diferente, antes solía hacerlos bien de pie, bien sentado en el suelo, ahora me siento pero además apoyo los pies en los soportes de la polea para mayor estabilidad y se nota mucho la diferencia, hoy he usado el stack entero. También hago una pausa en el punto de máxima contracción y negativas lentas.
En cuanto al cuello ha sido un espectáculo, jamás había obtenido una congestión tan potente de gaznate, en su immensidad palpitante semióticamente fálica. Ha sido la primera vez que he conseguido sobrepasar la mandíbula con el cuello a la altura de las orejas (lo achaco a la extensión de cuello) cosa que espero conseguir también en los próximos años sin congestionar.
Seguimos
