leroy wrote:Wilbur, sí.
Hacen todo eso.
Una de las cosas que enseñan es a trepar árboles.
También cargan, transportan u arrojan piedras.
Y defienden, lo que ya hacía Hébert, el entrenar descalzo si es posible.
Interesante.
Empecé con lo de las ramas de árbol porque un día jugando al basket llegaron unos niños que habían metido un balón en lo alto de la copa de un árbol muy ancho, de unos 10 metros de altura. Mi colega y yo empezamos a mover el tronco desde el suelo, pero el balón estaba bien enganchado. Entonces les dije, "Venga que subo", y trepé unas 3-4 ramas (subida fácil), hasta quedarme por la mitad del árbol. Moviendo desde ahí ya sí cayó la bola.
Flipé con la subida, fue algo "de verdad". Quiero seguir con ello.
Las piedras ya las tengo en mi casa, en verano son uno de mis juguetes principales. No obstante, tengo en mente ir a buscar piedras a un par de zonas (un río y un monte que tengo más o menos a mano).
Lo de descalzo es interesante, pero la verdad es que lo asocio a sitios "naturales", no le veo sentido a correr descalzo por la ciudad con todo lo que hay por el suelo (aceite de coche/gasolina, cristales, el propio asfalto, las pinturas de las señales viales, etc.).
Añadiría el lanzamiento de jabalina/venablo, por los mamuts y resto de caza mayor
.
leroy wrote:A mí me gusta mucho el sistema sin entrar en más honduras, como método gimnástico y fin.
Además, ¿no os parece que todos estos sistemas de "cambio de vida, no sólo a nivel físico, sino mental/psicológico/espiritual" son a base de frases tipo Paulo Coelho, de las que pone la gente en Twitter y poco más?
Maokoto wrote:Me está interesando mucho el rollo este del movimiento/movilidad últimamente.
Es que es todo, la fuerza es secundaria, sin pastel la guinda no tiene sentido.
Maokoto wrote:Vengo dándole vueltas a un sistema así, todavía más "natural", que permita a gente de 70 años levantarse sin ayuda y con soltura si se cae, agacharse... Y quien dice de 70 años dice gente rígida o desentrenada, que también le cuesta.
Ánimo con tu diseño, hay nicho de mercado, cada vez más y más viejos...y viejóvenes.